¡Estamos de fiesta! Dos integrantes de nuestro equipo están cumpliendo 10 años de trabajo en Triple P Latinoamérica. Anita Vidaurre, coordinadora de Capacitaciones y Servicios, y Javiera Cerda, directora de Metodología y Formación, se incorporaron en el año 2014, convirtiéndose con el tiempo en pilares fundamentales tanto para la organización como para sus compañeros, por la gran calidad profesional y humana que distingue a ambas.
“Cuando llegué, éramos solo dos personas: la anterior directora ejecutiva, Francisca Puga, y yo. Luego, se integró Javiera y fuimos 3 por mucho tiempo. Hacíamos un trabajo de hormiguitas. Ver cómo Triple P Latinoamérica ha crecido, saber que podemos llegar a muchas familias, poder prevenir maltrato, ser parte de los esfuerzos públicos a favor de los niños, niñas y adolescentes, me llena de orgullo”, comenta Anita.
“En estos 10 años, el cambio más grande lo he visto afuera de la organización –complementa Javiera–. Al principio, a pocos les importaba si el Programa era basado en evidencia, había muchos prejuicios y no se visualizaba mucho la importancia de apoyar a los padres en la crianza. Luego de una década, creo que, por fin, como sociedad estamos más conscientes de esta necesidad y de que las políticas públicas efectivamente ocupen recursos en lo que se ha probado que funciona”.
Para ambas, una de las experiencias más gratificantes que han vivido en el transcurso de estos 10 años ha sido la de convertirse en madres y cómo las metodologías de apoyo a la crianza las han ayudado en este rol, tanto como a cualquier otra familia que ha aprendido y puesto en práctica las estrategias de parentalidad positiva de Triple P.
“Lo principal ha sido estar en una organización que cuida, que me ha permitido tener calidad de vida. También, el haber podido aprender del apoyo a muchos profesionales y a muchas familias, porque al mismo tiempo uno se nutre. Y además, toda la metodología me ha servido mucho para mi rol de mamá”, revela Javiera Cerda, mientras Anita Vidaurre coincide: “Las herramientas que me ha dado para mi vida personal son invaluables. He crecido profesionalmente, como persona, como mujer y mamá”.
La directora de Metodología y Formación de Triple P Latinoamérica comenta que, a diferencia de lo que ocurría hace 10 años, “hoy día hay menos estigma en pedir ayuda para la crianza y se tiende a romantizar menos el ser madre o padre. Cada vez se habla con mayor naturalidad de los desafíos, de lo cansador que a veces puede ser o de lo perdidos que a veces podemos estar. Por otra parte, cada vez se releva más la importancia del rol del hombre en la crianza, la corresponsabilidad de criar. Incluso, hoy se asume que no solo debe recaer en los padres, sino también en la comunidad y esa es una lucha que tenemos que seguir defendiendo”.
Muchas gracias, Anita y Javiera, por estos 10 años de entrega y compromiso con su trabajo en Triple P Latinoamérica. Esperamos que sigan formando parte de este equipo por mucho tiempo más, para que juntos continuemos impulsando el acceso universal a apoyo para la crianza y así beneficiar a muchos más niños, niñas, adolescentes y sus familias, en nuestra Región.